sábado, 7 de octubre de 2017

RECORD DE PARTICIPACIÓN EN SAN SATURIO 2017

Sobre aguas del río Duero ha trascurrido la V Regata de San Saturio a su paso por Soria en el Paseo de San Prudencio, entre el Puente de Hierro e Isla María, un islote al otro lado del Soto Playa. 



Un total de 24 clubs venidos de toda España han participado con 273 palistas en 340 embarcaciones que han llenado de color al río Duero. Todo ello en un día soleado con agradables temperaturas y muy buen ambiente deportivo.
La regata, en su 5º año se realiza en honor a las fiestas de San Saturio, su ermita de es de estilo Barroco y fue construida en el siglo XVIII levantándose sobre una gruta eremítica visigoda situada a orillas del Duero, en la denominada Ruta Machadiana. 
Acoge en su interior pinturas al fresco que narran la vida de San Saturio, hijo de una noble familia del siglo V y que fue canonizado por entregar todos sus bienes a los más necesitados y retirarse luego a una vida de anacoreta. También acoge los restos y el sepulcro del santo soriano.
El recorrido constaba de varias vueltas entre el puente de San Saturio e Isla María, siendo de 5 km para las categorías de Cadetes, Juveniles, Senior y Veteranos, y de 3 km para las categorías de infantiles, alevines y benjamines, en masculino y femenino respectivamente
La prueba ha contado con la presencia y participación de medallistas como Carlos Larrea, Javier Melus, David Machado (ganador del año pasado en K1 y K2), Jorge Cinto, Víctor Segura, Ángel Lorenzo Celorrio, J.C López Villalobos y Mara Santos, Paloma Cinto, Sarah Barahona Wilford 
y muchos otros participantes que hacen de esta jornada una prueba de nivel para regatistas y espectadores, 
pero sobre todo para disfrutar del deporte en la naturaleza con la gran familia que forma el piragüismo.


Como representantes de la Comunitat Valenciana han participado el Club Piragüismo Castellón y la Penya Piragüista Antella con gran éxito en el medallero.



y para terminar el Romance del Duero de Gerardo Diego:

Río Duero, río Duero,
nadie a acompañarte baja,
nadie se detiene a oír
tu eterna estrofa de agua.

Indiferente o cobarde
la ciudad vuelve la espalda.
No quiere ver en tu espejo
su muralla desdentada.

Tú, viejo Duero, sonríes
entre tus barbas de plata,
moliendo con tus romances
las cosechas mal logradas.

Y entre los santos de piedra
y los álamos de magia
pasas llevando en tus ondas
palabras de amor, palabras.

Quién pudiera como tú,
a la vez quieto y en marcha,
cantar siempre el mismo verso
pero con distinta agua.


Río Duero, río Duero,
nadie a estar contigo baja,
ya nadie quiere atender
tu eterna estrofa olvidada,

sino los enamorados
que preguntan por sus almas
y siembran en tus espumas
palabras de amor, palabras.

No hay comentarios:

Publicar un comentario